El otro día fui al oculista a graduarme las gafas, y entonces, se me 
ocurrió hacer esta idea para el concurso. La vista es uno de los 5 
sentidos del cuerpo humano junto con el gusto, el olfato, el oído y el 
tacto.
 Desde que naces, tus ojos cumplen una función esencial para su 
desarrollo físico, mental y emocional. La vista nos permite percibir la 
forma, la distancia, el tamaño y el color de los objetos.
 Para
 que podamos ver, los rayos de luz entran en las pupilas y se registran 
en las retinas, en el fondo de los ojos, donde se crean imágenes 
invertidas. Éstas se convierten en impulsos eléctricos, llevados a 
través del nervio óptico de cada ojo al cerebro, al lóbulo occipital, 
donde son interpretados.
 El color de ojos de cada persona es diferente. Esto se debe a que 
cada persona tiene un rasgo genético que está determinado por la 
cantidad y la distribución de melanina en el iris.
 La pupila 
es una parte del ojo muy importante, ya que controla la cantidad de luz 
que entra en el ojo. Aumenta de tamaño cuando hay poca luz y disminuye 
cuando hay mucha. Toda esta luz se concentra en la pupila gracias a la 
córnea, que desvía los rayos luminosos hacia un único punto, actuando 
como una lente convexa. 
  Pero al igual que muchas partes del cuerpo humano, el sentido de 
la vista también puede traer problemas. En la adolescencia pueden 
aparecer defectos de graduación, como la miopía, hipermetropía o 
astigmatismo. Cuando vas creciendo pueden aparecer otras, como 
desprendimiento de retinas, ojo seco, glaucoma...Como remedio se usan 
las gafas, lentillas, gotas e incluso las operaciones.
 La ceguera es la perdida del sentido de la vista. Es la falta de 
visión que no se puede corregir con gafas o lentes de contactos.
                                                                                            Martina Ferrary 3ºA